¿Cómo es montarte tu propio negocio? Emprender trae consigo experiencias y aventuras muy satisfactorias, sin embargo, también existen ciertos riesgos que vale la pena tener en cuenta antes de iniciarte a explorar lo desconocido.

En Boreal Open Systems, entendemos el emprendimiento como una actitud personal, ya que ese impulso que nos lleva a salir de nuestra zona de confort es lo que hace que transformemos las circunstancias en oportunidades futuras.

Así, si estás pensando en darle forma a ese proyecto que tienes en mente, o simplemente te apetece leer nuestra recopilación, os dejamos algunos de esos tópicos acerca de emprender que debéis reflexionar y revisar para desarrollar vuestro máximo potencial a la hora de crear vuestra propia empresa. ¿Te quedas a echarles un vistazo?

Qué mitos no debes creerte si quieres emprender:

Es cierto que la crisis y situación actual ha llevado a mucha gente a dar el paso de crear su propia “start up”, pero todavía hay dudas muy extendidas en relación a emprender una idea de negocio.

No deberíamos confundirnos y dejarnos llevar por falsos mitos que nos limiten o convenzan de aspectos que no son del todo verdaderos. Y es que al final, cada persona, proyecto e idea es un mundo, por lo que cualquier afirmación nunca podremos tomárnosla al pie de la letra.

Por esa razón, hemos querido compilar estos tópicos, con la finalidad de haceros reflexionar sobre su veracidad:

1. Tener una idea brillante te hará rico.

Una idea brillante, si no se sostiene bajo una buena ejecución, sirve de poco. No decimos que sea innecesaria, pero tampoco lo consideramos suficiente para que un negocio germine.

Os ponemos un ejemplo: imaginad dos equipos que se enfrentan en un partido de fútbol. Cada uno conoce las reglas del juego y está dispuesto a aventurarse a ganar, pero cada equipo seguirá su propia estrategia y forma de hacer las cosas. La ejecución de cada uno será el factor principal que determine quién de los dos logre un mejor resultado.

Asimismo, una idea medianamente buena pilotada por un equipo excelente, le dará mil vueltas a una idea brillante llevada a cabo por un equipo medianamente bueno. ¿Y que marcará la buena ejecución? Se deberá acertar en los ajustes, ser flexible y actuar rápido. Eso determinará cuán bueno será el “equipo”.

2. Si posees una buena idea, te buscarán.

Ya lo sabéis, no sólo hay que hacer algo superior, sino que hay que comunicarlo y hacerlo bien. Ningún producto se vende solo, a pesar de haber fenómenos virales en algunos casos, por lo que tendrás que dar a conocer tu idea por las vías que consideres necesarias.

No sólo por hacer el mejor producto el cliente lo aceptará, por tanto, a la hora de transmitir tu propuesta de valor, debes tener claro qué es lo que quieres comunicar. Cuando tengas bien definido el sentido de tu proyecto, entenderás la importancia de tu propuesta y podrás tener más claro el mensaje a comunicar para llegar mejor a tus potenciales clientes.

3. Necesito mucho capital para comenzar mi negocio.

Se trata de lograr que tu idea brillante dé sus frutos; y es innegable que si no inviertes tu tiempo y tu dinero, nadie lo hará por ti. Sin embargo, debéis saber que son muchas las empresas que se han formado con poco capital y fueron creciendo paulatinamente.

Esa es la esencia de una start up: parten de una idea innovadora relacionada generalmente con el desarrollo tecnológico y buscan explotar nichos de mercado que tengan un gran potencial, atrayendo a los llamados “Business Angels” (inversores privados que facilitan capital).

Primero deberías centrarte en analizar si tu idea se puede vender, y luego estudiar si lo puedes producir a un coste razonable. Igual cooperar con otros contactos que estén interesados en participar en tu idea es una opción mucho más barata y factible para empezar.

4. No tener competencia es bueno.

Algunos creen no solo que han encontrado la idea del siglo, sino que los demás se la robaríamos si la conociéramos. Estas personas olvidan que abrir un nuevo mercado es mucho más arriesgado que lanzarse en un mercado existente, y que, al fin y al cabo, las empresas que “ganan” no son las primeras en llegar, sino las que realizan una mayor ejecución.

Por un lado, es verdad que para diferenciarte, debes proponer algo diferente, y que represente una ventaja respecto a la competencia. Sin embargo, en la mente de muchos candidatos a emprender, pensar en algo que nadie haya pensado antes significa tener la idea del siglo, bajo un concepto revolucionario que les hará de oro. Y es este pensamiento el que consideramos.

5. Un emprendedor nace, no se hace.

No es la genética lo que determina la capacidad emprendedora o innovadora de una persona, más bien sería el conjunto de comportamientos y creencias que guían sus actitudes y decisiones. ¿Pero de dónde sale ese “carácter emprendedor”? Influirán las competencias que ha desarrollado en su proceso de aprendizaje y los referentes sociales que se dispongan.

Y es que, a pesar de que muchas personas tengan un perfil de emprendimiento muy marcado, comenzar un negocio requiere conocimientos, esfuerzo y habilidades. Nosotros defendemos que a emprender se aprende, como todo, y eso es algo que depende sólo de nosotros.

Conclusiones

Para construir una empresa, es necesario dedicarle todo el tiempo que requiera, a fin de buscar el mejor modelo de negocio en un entorno de alta incertidumbre. Y es que iniciar una nueva idea de negocio supone hacer realidad un proyecto que estaba plasmado en tu mente. Y esto no es un camino fácil, ya que consiste en ver la oportunidad y aprovecharla.

Es en el momento en que esa oportunidad se cruza con tu talento cuando debes rodearte de gente capaz que emprenda ese proceso de exploración contigo. Esforzarse por aprender lo máximo posible acerca del mercado será esencial para construir un servicio o producto que la gente quiera consumir. Y tú, ¿crees como nosotros que de los pequeños comienzos nacen grandes cosas?